RESEÑA. El caso de Harry Quebert, de Joël Dicker

 Reseña del libro: La verdad sobre el caso Harry Quebert, de Joël Dicker.

Este es un libro especial que me ha maravillado. Entiendo que no es un libro para cualquier tipo de lector por sus peculiaridades y su afán de cubrir a un público amplio, sin embargo, como el propio Joël afirma en el libro, quien no arriesga no gana.

SINOPSIS

Marcus Goldman, un joven escritor de éxito, en uno de sus momentos más bajos de su carrera visita a su antiguo mentor, Harry Quebert, autor de una aclamada novela. Descubre en esta visita que tuvo una relación secreta con Nola Kellergan. Poco después, Harry es arrestado al descubrirse, quince años después de la desaparición de la joven, su cuerpo sin vida enterrado en el jardín de su casa. Aquí comienza una ardua tarea de investigación por parte de Marcus para intentar desentrañar que pasó quince años antes, rebuscar en muchas heridas del pasado e intentar demostrar la inocencia de Harry. La verdad solo llegará al final de un intrincado y apasionante recorrido que hará revivir muchas partes del pasado que no todo el mundo quiere que se descubran.

OPINIÓN

Este libro posee una estructura intrincada y especial que hace que marque diferencia. Para nada es un libro lineal y apuesta por muchos narradores que se entrecruzan, algunos en el presente, otros en el pasado, otros incluso que llegan a contar posibilidades. El libro parece enmarcarse en el género de intriga y thriller, pero realmente es una mezcla arriesgada entre un libro de romance, el romance prohibido de una chica quince años con un adulto, Harry Quebert, es un thriller donde se intenta resolver el gran misterio de quien mató a Nola en el pasado y quien acosa a Marcus en el presente. Al mismo tiempo, este libro es un libro que habla sobre el mundo de la literatura, las editoriales y las publicaciones de gran éxito. Narra las trampas, los desafíos, las presiones y los plazos que terminan en la publicación de un gran bestseller. Este libro habla sobre el proceso de publicación de un libro y al mismo tiempo es una guía para escritores. 

Harry, en el pasado da consejos de escritura a su protegido, Marcus, le da 31 consejos que empiezan, como una cuenta atrás, desde el 31 al 1, cada capítulo.

Este libro habla de envidias, de pueblos pequeños y de como las vidas de toda una comunidad se entrelaza en un pueblo pequeño y avanza a lo largo del tiempo, escondiendo secretos inconfesables y amores imposibles, unos correspondidos, otros no tanto.

Sé que es una apuesta arriesgada dedicar tanta parte del libro al romance pasado, a aquellos que busquen un thriller rápido, esta parte los espantará, igual al contrario, a los que busquen esa parte de romance, la parte de thriller tal vez no les sea cómoda. Sin embargo, habrá unos lectores, entre los que me encuentro que disfrutarán al encontrar esa variedad, al descubrir varios libros en uno.

Os dejo aquí abajo, reescritos con mis palabras los 31 consejos de Harry Quebert sobre la escritura de un libro, esos consejos que Marcus apuntaría en una libreta con sus propias palabras. No aparecen tal cual en el libro, pero he querido sacar la esencia de ellos, ya que algunos son buenos para tenerlos presentes.

CONSEJOS SOBRE ESCRITURA DE JÖEL DICKER en boca de HARRY QUEBERT

31 - El primer capítulo es esencial. Si a los lectores no les gusta, no leerán el resto del libro. 

30 - El capítulo 2 es muy importante. Debe ser incisivo, contundente.  Es como cuando se boxea, el primer capítulo debe aturdir a su adversario, el poderoso gancho del otro brazo es el que debe tumbar en el segundo capítulo: un derechazo en la mandíbula de los lectores.

29 - Todo el mundo sabe escribir, pero no todo el mundo es escritor. ¿Y cómo saber si uno es escritor? Eso lo deciden los lectores, no uno.

28 - La vida es una larga caída. La más importante lección para un escritor es saber caer.

27 - Si un escritor no sabe si es bueno lo que está escribiendo, es hora de dejarlo, salir a dar una vuelta, hacer ejercicio hasta que nazca en uno la rabia de vencer.

26 - Los escritores son seres frágiles porque pueden conocer dos clases de dolor afectivo: las penas de amor y las penas de libro. Escribir un libro es como amar a alguien, puede ser extremadamente doloroso y a la vez placentero.

25 - ¿Cómo se convierte alguien en escritor? No renunciando nunca. Vivimos en una sociedad de empleados de oficina resignados, para salir de esa trampa hay que luchar con uno mismo y contra el mundo entero. La libertad es un combate continuo del que no somos conscientes. No hay que resignarse ni rendirse nunca para cumplir tus sueños.

24 - Escribir es como boxear: Uno debe ponerse en guardia, lanzarse ala batalla, levantar los puños y enfrentar a los adversarios. Un libro es una batalla.

23 - ¿En quién se inspiran los personajes? En todo el mundo: un amigo, la mujer de la limpieza, el empleado del banco. Pero no son las personas las que inspiran, sino sus acciones. Su forma de actuar es lo que hace pensar que podrían ser personajes de una novela. Los escritores mienten al decir que no se inspiran en nadie, sí, pero así se ahorran un montón de problemas. Un escritor puede ajustar cuentas con sus semejantes gracias a un libro. La única regla es no citarlos directamente, nunca por su nombre. No se debe escribir más que ficción, el resto puede traer problemas.

22 - ¿Cómo se puede confiar en tener siempre la fuerza para escribir libros? Porque es una especie de enfermedad, la enfermedad del escritor. Es la enfermedad de no querer escribir más y ser incapaz de dejarlo.

21 - El único modo de medir cuanto se ama a alguien o a algo, es perdiéndolo.

20 - La victoria está en uno. Basta con querer dejarla salir.

19 - Los escritores deben de ser disciplinados. Hay horarios que respetar, ejercicios que repetir. Conservar el ritmo, ser tenaz y respetar un orden impecable en sus asuntos. Eso protege del enemigo de los escritores: el plazo.  No se puede llegar tarde, hay que respetar los plazos, aunque si se pueden saltar, saltadlos, es más divertido.

18 - La más difícil de las empresas es poner en pie el amor. Esos son los hombres más nobles y admirables. 

17 - Cuando tengáis una idea, en lugar de convertirla inmediatamente en uno de esos ilegibles cuentos, guardadla y dejadla madurar. Que crezca en vuestro interior hasta que se sienta que ha llegado el momento. Las ideas deben de convertirse en iluminaciones.

 16 - ¿Cuánto tiempo se necesita para escribir un libro? Depende. ¿De qué depende? Depende de todo. Cada manuscrito lleva su tiempo, hay que respetarlo.

15 - Las palabras en sí no son lo más importante en la escritura, lo es más el sentido que se les da a ellas. Se puede abrir un diccionario y elegir una palabra cualquiera, es en ese momento cuando se vuelve interesante, cuando se le da un sentido en particular y un uso. Las palabras son de todos, hasta que un escritor se apropia de ellas y las convierte en su seña de identidad.

14 - En la vida hay que elegir continuamente entre la razón y la pasión. La razón no sirve de nada y la pasión a menudo es destructiva. La vida es una estafa

13 - Publicar en muchos casos es perder el control. Lo que un escritor escribe en compañía de la soledad se escapa de pronto de nuestras manos y desaparece entre la gente. Es un momento peligroso donde se debe conservar el control de la situación. Perder el control de nuestro propio libro resulta catastrófico.

12 - Hay que aprender a amar las derrotas. Eso es lo que construye a un escritor. Las derrotas darán un sabor más grandioso a las victorias.

11 - En la escritura debe de darse todo. Cada libro puede ser el último, así es la vida.

10 - ¿Cómo se transmiten las emociones que no se han vivido? Ese es justo el trabajo de un escritor. Escribir significa ser capaz de sentir mejor que los demás y ser capaz de transmitirlo todo después; es permitir que los lectores vean lo que a veces se les escapa. Si la literatura se limitara a la experiencia del escritor sería espantosamente triste y perdería su sentido. Un escritor tiene el derecho de poder hablar de todo lo que le conmueva, porque hacen diferente una cosa que todo el mundo a su alrededor sabe hacer, escribir. Ahí reside el ingenio del escritor, en ser diferente.

9 - Las palabras están bien, pero un escritor no debe escribir para que le lean, sino para ser escuchado.

8 - Tanto en la vida como en la escritura, quien arriesga gana. Pensad en eso cada vez que os enfrente a una decisión difícil en vuestras obras.

7 - Después de los libros hay otros libros. Después de la gloria, hay otras glorias. Después del dinero, hay más dinero. Pero después del amor, no queda más que la sal de las lágrimas. Anhelad el amor y haced de él la más hermosa conquista.

6 - Las palabras están bien, pero a veces son vanas y no bastan. Llega un momento en que ciertas personas no querrán escuchar. Entonces, reparta algunos puñetazos.

5 - Un nuevo libro es una nueva vida que empieza. Es también un momento de gran altruismo: el escritor ofrece a quien quiera descubrirla, una parte de si mismo. Algunos lo adorarán, otros lo odiarán. Algunos lo convertirán en una estrella, otros lo despreciarán. Algunos se sentirán celosos y otros interesados. Pero no es para ellos para quien debe escribir un escritor, sino para lo que en su vida diaria habrán pasado un buen momento gracias a él. Algunos escritores quieren cambiar el mundo, pero ¿quién puede hacerlo?

4 - En la recta final de todo libro el escritor debe ofrecer a sus lectores un giro argumental de último minuto. Hay que tener al lector en vilo hasta el último momento. Es como cuando se juega a las cartas, se deben guardar algunos triunfos para el final.

3 - La vida de un escritor está salpicada de grandes acontecimientos. Mencionadlos en vuestros libros. Si al final se revelan nefastos, al menos tendréis el mérito de marcar algunas páginas de la Historia.

2 - A veces el desaliento vencerá a un escritor. No hay que dejar que el cansancio no el miedo os impidan escribir, hay que utilizarlos para avanzar.

1 - El último capítulo de un libro, siempre debe ser el más hermoso.